La ley aprobada en Kuwait de recolección de información genética de los ciudadanos, residentes y visitantes fue impugnada por violar derechos humanos y libertades fundamentales protegidos por la Constitución. La norma contra el terrorismo obligará a entregar una muestra de saliva o de sangre, para que esta información sea ingresada a una base de datos de un laboratorio de Departamento General de Evidencia Criminal. Aquel que se rehúse a proveer una muestra podría enfrentar un año de cárcel, o bien una multa de hasta treinta y tres mil dólares. Por su parte, se ha expresado preocupación por el uso que se le dará a esta información genética, a lo cual se ha respondido asegurando que sólo se utilizará para propósitos de seguridad.