Australia aprobó una modificación a su ley de privacidad que implementa un sistema obligatorio de notificación a las víctimas tras las filtraciones de sus datos personales. Este nuevo sistema tiene como finalidad proteger los derechos de los individuos, mejorar la confianza de la comunidad en las empresas y agencias, y aumentar la transparencia de la forma en que el sector privado y público maneja las filtraciones de información. Además, esta enmienda le otorga nuevas facultades al Comisionado de Privacidad e Información Australiano, el cual se encargará de guiar en la implementación de este nuevo sistema.