El Grupo de Investigación de Privacidad y Tecnología de la Escuela de Derecho de la Universidad de Georgetown demandó al Departamento de Policía de Nueva York (NYPD, por sus siglas en inglés) tras rehusarse a transparentar información sobre el uso de sistemas de reconocimiento facial. La solicitud fue realizada por el Grupo a más de 90 agencias de los Estados Unidos, ante la cual el NYPD respondió que no contaba con los registros solicitados. Los interesados interpretaron esta negativa como una falta de control en el uso de esta tecnología, pues existe información de acceso público que entrega evidencias de que efectivamente el programa existe, razón por la cual decidieron demandar judicialmente el acceso a estos datos.