La Comisión Europea presentó ante el Parlamento y Consejo de la Unión Europea su propuesta formal de regulación sobre la privacidad y comunicaciones electrónicas. Con esta propuesta se busca, entre otros objetivos, aumentar el ámbito de aplicación de la directiva actual, rigiendo para todas aquellas compañías que procesen información y estén relacionadas a los servicios de comunicación; crear nuevas posibilidades de procesar información y reforzar la confianza y seguridad en el mercado digital; garantizar privacidad tanto para el contenido de las comunicaciones como para su meta data; y simplificar las normas aplicables para las cookies. La propuesta está alineada con el Reglamento General de Protección de datos (GDPR, por sus siglas en inglés), por lo cual se pretende que su adopción sea simultánea a la entrada en vigencia de éste en el año 2018.